delme escribió: ↑Sab 13 Ene 2018 8:03 pm
La introducción de la multa fue, para mi, el principal avance de lo 7/2015, mas importante q lo de la categoria como garantia salarial. Comparto el diagnóstico de los compañeros no han hecho sangre
Discrepo completamente contigo en eso.
La introducción de la multa fue una auténtica aberración. De hecho, es llamativo que el estatuto de los trabajadores expresamente prohíbe las multas, pero nosotros, sorprendentemente, las aplaudimos.
Además, con motivo de la introducción de las multas nos incrementaron el plazo de prescripción de las infracciones, que anteriormente era muy breve y muy favorable, pero ese es otro tema.
Me explico, una multa implica que tengas que ir a trabajar (asumiendo las obligaciones inherentes a ello) pero con merma del salario.
Es decir, en el fondo, pagas por ir a trabajar.
Además, por su naturaleza, no es deducible, por lo que además de pagar, tienes que tributar a pesar de que los ingresos se reducen como consecuencia de aquella.
Una inhabilitación no, pues si no vas, pues no cobras y punto. Ya te buscas la vida esos meses y ya está.
Una multa de quinientos euros, que es la impuesta a la compañera, implica económicamente unos 9 días de sueldo, es decir, casi dos semanas sin cobrar, pero trabajando.
La multa máxima, son casi dos meses sin sueldo, pero yendo a trabajar.
A mí me parece una barbaridad,preferiría ser inhabilitado a multado, pues tanto yo como mi familia, tenemos la manía de querer comer todos los meses y con mi sueldo llegamos muy justos a fin de mes.
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Y por último, decir que viendo los plazos que relata el periódico, y el tipo de sanción impuesta, casi con toda seguridad la infracción estaba prescrita, probablemente el expediente caducado (faltan datos pero diría que si) y en todo caso la sanción no respetaría el principio de tipicidad.
Estoy seguro de que lejos de hacerle un favor a la compañera, atendiendo a las circunstancias que he señalado arriba, impusieron esa sanción con la esperanza de que no recurriera (pues el collar sería más caro que el perro) evitando que el juzgado pintara la cara al Ministerio, por la forma de tramitar el disciplinario, en un tema tan mediático.